Hoy.
He tardado en darme cuenta, pero hoy sé qué quiero.
Quiero ser lo que realmente soy, y nunca he logrado ser por miedo. Por inseguridad. Por falta de garra y de ayuda en muchas ocasiones.
Hoy sé que quiero ser alguien. Y que no importa lo que me lo impida, porque voy a luchar por ello. Y a creer. Tengo que creer. En mi. Y en un futuro.
Poco a poco me voy dando cuenta de como funcionan las cosas. Y de como deberían andar. Así que intento cambiarlas. Esto está en proceso, sí. Funciona a medias, claro. Aún queda mucho por hacer, pero es un comienzo.
Está en mi mano, y por fin me he dado cuenta de ello. Así es como va a ir todo a mejor.
Sigo teniendo miedo, eso no puedo negarlo. Y las dudas me ahogan. Pero salgo a flote. Porque quiero hacerlo. Y sé que lo lograré. Hay días mejores y días peores. Pero una constante siempre está ahí: la ilusión.
Y me he dado cuenta hoy de que cuando menos te esperas las cosas, suceden. Cuanto más te resignas, más alto vuelas. Al final, va a ser nuestra propia culpa...
Cómo evitar dar vueltas a todo lo que nos consume. Cómo hacerlo...
Y sin más, cuando lo logras, por el motivo que sea, la luz se hace. Como si nada. Algo se activa.
No confío en que irá a mejor. Pero espero que sea así. Y no voy a perder eso.
El mundo gira demasiado rápido para mí. Siento que funciono despacio. Despacio y con problemas. Y todo lo demás gira, dejándome atrás sin más. Pero sé que mi momento va a llegar. A todos nos llega.
No voy a ser menos. Estoy deseando que llegue, es verdad. Pero ni falta tanto, ni es tan dura la espera.
Ahora mismo mi problema sois vosotros. Sé quien está ahí. Quien, por desgracia, no se va. Un día consigo echarlo casi en su totalidad y al siguiente me llena completamente. Pero sé como son las cosas ahora, y cómo las veo yo. E imagino como las verás tú. Por eso se que no hay nada que hacer. Y que saldría mal. Fatal. Sería un error. Y todavía no estoy preparada para esa clase de errores.
Por otro lado está otra persona, que es la que me da aire fresco. Voz, ganas, y sonrisas.
Y eso es lo que me encanta.
Porque aunque sé que es más de lo mismo, y son solo imaginaciones mías (que debería empezar a borrar. Tengo que aprender a hacerlo), siento dentro de mi que hay un fin.
Y con otra persona no, pero contigo, me dejaría llevar. Lo juro. Si ahora mismo fuese el momento, ahí estaría, hablando claro.
En mi mente todo se dibuja más sencillo, ¿sabes?
Pero sé que algún día esa imagen se hará realidad. Y si no eres tú quien la ocupa, será otro. Pero será porque le quiero. Nada más y nada menos.
Nunca entenderé por qué sigo leyendo libros y viendo películas donde el amor existe.
Las series que me llenan el alma en estos años de vida porque no he vivido ni la mitad. (Pero que me hacen ver también el por qué de mi espera).
Quiero un amor de televisión. Pero ya que eso es complicado... me conformo con un amor.
Me conformaría.
De veras. Contigo, estoy conforme.
IT'S GOTTA BE YOU.