Aquí dentro algo se mueve. Es más, me hace daño. Creí que soportar pequeñas cosas me haría más fuerte, pero al contrario de lo que suponía, solo consigo hacer más duros los recuerdos.
Momentos insignificantes, que para mí lo son todo ahora mismo. Y desde hace ya algún tiempo.
No sé si habré hecho bien en continuar por este camino correcto. A lo mejor a veces hace falta volverse un poco loco. Saltarse las normas.
Puede que la perfección después de todo, empiece donde acaban las reglas. Quizá el carpe diem hay que tomárselo un poco más a la ligera.
No sé que es lo que me está pasando. Pero me apetece correr hacia ti la próxima vez que te vea.
Quiero dejar de imaginar, y vivir. Y quiero y necesito que sea a tu lado. Y pronto.
Pero la indecisión me sigue de cerca.
Las consecuencias.
Por eso solo necesito que el tiempo pase rápido. O que un momento clave surja, y que una especie de señal me lo confirme. Dejarse llevar.
Solo eso.
Pero ¿cuándo?... ¿y como saber si realmente.. es lo que me hace falta?
¿Cómo saber qué piensas tú?
Por favor, deja de darme falsas esperanzas. Ilusiones. Esto no es lo que buscaba. Y apareces tú. Y lo complicas todo. (O lo haces más fácil de lo que creo). Pero dime algo. Necesito ayuda. Necesito una señal.
Un algo. Y todo llegará.
Siento que cada vez más tengo celos de todo.
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